Tanto si eres propietario y deseas vender o alquilar tu vivienda o inmueble, o estás buscando un piso para comprar o alquilar, es importante que conozcas el término eficiencia energética. También debes saber qué es el certificado energético de una vivienda y cómo obtenerlo para realizar la transacción de compra-venta con total fiabilidad.
¿Qué es el certificado energético?
El certificado de eficiencia energética (también conocido como CEE) es un documento que nos da toda la información necesaria para conocer el estado energético del inmueble y la calificación energética del mismo. Es, por así decirlo, la nota que se le pone a nuestra casa en función de la energía que consume.
Si estás pensando en alquilar o vender tu vivienda, debes saber que, desde el 1 de junio de 2013 es obligatorio disponer de este certificado y enseñárselo a los futuros propietarios o inquilinos.
Quién puede tramitar un certificado energético
Son muchos los profesionales que pueden emitir certificados energéticos. Entre ellos, destacan los arquitectos, arquitectos técnicos, aparejadores, un técnico certificador e incluso ingenieros.
En Crisálida Arquitectura ofrecemos, dentro de nuestros servicios, la emisión de certificados energéticos. De esta manera, podrás, además de realizar la reforma o construcción de tu nuevo hogar, obtener el certificado necesario para demostrar que tu inmueble cuenta con una eficiencia óptima.
Pero, además, existen otros medios para conseguir este certificado:
- Los órganos oficiales de cada Comunidad Autónoma.
- Los colegios de arquitectos e ingenieros locales.
Cómo se obtiene un certificado energético para la vivienda
Para saber cómo se hace un certificado energético, debemos contactar con un profesional que nos lo pueda realizar. ¿Cómo trabajamos en Crisálida Arquitectura para emitir tu certificado? Siguiendo estos pasos:
1- Llevamos a cabo una inspección del inmueble para conocer de primera mano la situación y el estado del mismo.
2- Realizamos los planos, donde especificamos todos los detalles de la vivienda (m2, altura, ventanas, distribución…).
3- Recopilamos la información administrativa necesaria sobre el inmueble (referencia catastral, cédula de habitabilidad…).
4- Calculamos el importe final (que puede variar de un inmueble a otro).
5- Aprobamos y firmamos el certificado con la calificación correspondiente usando los programas informáticos de certificación energética aprobados por el Estado. La calificación podrá ir de la A (la nota más alta) a la G (la más baja).
Una vez hayamos hecho todos estos pasos, el propietario ya podrá hacer uso de dicho certificado y registrarlo en el órgano competente de su Comunidad Autónoma.
Factores que influyen en el cálculo de la certificación energética
Para que la calificación energética sea lo más alta posible (A), tenemos en cuenta aspectos muy importantes del inmueble que lo hacen más eficiente energéticamente hablando: envolvente térmica, confort térmico y lumínico, calidad del aire, instalaciones integradas en la vivienda, sistemas de climatización… Así, cuanto mejores sean estas condiciones, mejor nota podrán tener una vivienda o edificio.
Qué contiene el certificado energético
El certificado energético de una vivienda o edificio constará de cierta información necesaria:
- Identificación del edificio: Dónde está ubicado, cuál es su referencia catastral, superficie…
- Indicación del procedimiento reconocido, según el art.4 utilizado para obtener dicha calificación.
- La normativa sobre ahorro y eficiencia energética de aplicación en el momento de su construcción.
- Una enumeración de las características energéticas del edificio: sistemas de climatización, aislamiento de ventanas, paredes y techos, instalaciones térmicas y de iluminación, condiciones normales de funcionamiento y ocupación, entre otras.
- Un listado de las comprobaciones y estudios llevados a cabo previa emisión de la etiqueta.
- La calificación energética del edificio o vivienda según aparece en la etiqueta energética.
- Recomendaciones de mejora energética si la vivienda ya está construida.
- Cumplimiento de los requisitos medioambientales exigidos a las instalaciones térmicas.
La etiqueta de eficiencia energética
Las etiquetas de eficiencia energética son aquellas que indican la calificación que se le ha otorgado a una vivienda, edificio, local, e incluso electrodoméstico. Indica su nivel energético.
Sería así:
Como vemos, la etiqueta energética consta de tres partes principales con todos los datos del certificado energético necesarios:
- En la parte superior encontramos los datos del edificio o vivienda (referencia catastral, tipo de inmueble…)
- En la zona central del adhesivo, la nota obtenida. La calificación puede ir desde la A (alto grado de eficiencia) a la G (bajo grado de eficiencia energética). También podemos encontrar otros datos interesantes que entran más en detalle, como el consumo de energía anual y el consumo de CO2 anual del inmueble.
- Y en la parte inferior, podemos ver el nº de registro del certificado energético y la fecha de validez.
Precio de un certificado energético
La cuantía puede variar dependiendo del coste de las tasas de la Comunidad Autónoma y de la provincia, además de los gastos de gestión por parte del arquitecto o técnico encargado de tramitarlo. También puede variar ese precio en función del tipo de inmueble. Por lo general puede costar desde unos 75€ a unos 150€ más impuestos, y por ejemplo en Castilla y León se ha de sumar una tasa de 29,10€, que cobra la Junta de Castilla y León, al registrar el CEE.
Si estás interesado en saber cuál será el coste de tu certificado energético en Valladolid, pregúntanos sin compromiso.
Cuánto tarda el certificado energético
Si tienes en mente alquilar o vender un inmueble pero no dispones aún del certificado energético, nuestra recomendación es que lo solicites con tiempo para poder proceder a la venta o alquiler lo antes posible. Mejor empezar cuanto antes.
Para saber cuánto tiempo tardaremos en obtener el certificado energético, deberemos tener en cuenta dos factores. Por un lado, el arquitecto o técnico debe visitar el inmueble, tramitar la documentación necesaria y enviarla al registro de la Comunidad Autónoma. Esto suele durar un par de días como mucho. Por otro lado, faltaría la generación de la etiqueta y el tiempo en hacerlo dependerá de cada Comunidad Autónoma.
Cuánto tiempo dura un certificado energético
Según el Real Decreto para la Certificación de la Eficiencia Energética de los Edificios, la validez de un certificado energético será de 10 años como máximo, exceptuando la calificación energética G, cuya duración será de un máximo de 5 años.
Como te habrás dado cuenta, usamos la palabra “máximo”, porque no es obligatorio que mantengamos la etiqueta durante ese tiempo. Si, por la razón que sea, queremos realizar obras en nuestro inmueble a los 2 o 3 años, por ejemplo, para mejorar la eficiencia energética del mismo, podemos volver a solicitarla y renovar la calificación.
Legislación sobre el certificado energético
Mucha es la legislación referente a los certificados energéticos, pero vamos a quedarnos con la más interesante y útil para los propietarios.
La legislación advierte de la obligatoriedad de mostrar la etiqueta de certificado energético de manera permanente:
- Edificios privados con más de 500m2 útiles de superficie.
- Edificios públicos con más de 250m2 útiles de superficie.
Esta etiqueta debe estar situada en un lugar perfectamente visible para todo el mundo.
Para el resto de edificios o viviendas, se hará de manera voluntaria, es decir, no será obligado que la etiqueta esté en un lugar visible.
Certificado energético para alquilar o vender una casa
Como ya hemos comentado, es obligatorio disponer del certificado energético si queremos vender o alquilar una casa como indica el Real Decreto 390/2021.
Pero, ¿qué puede pasar si no lo tenemos? Pues que nos arriesgamos a que nos pongan una multa de las importantes.
Multas por alquilar o vender sin tener un certificado energético
¿A cuánto puede ascender una multa si nos pillan alquilando o vendiendo un inmueble sin certificado energético? Dependerá de la gravedad de nuestra falta de ética al hacerlo. Tenemos 3 casos posibles:
- Si no indicamos la calificación en los anuncios que pongamos en internet u otras plataformas: entre 300€ y 600€.
- Si no registramos el certificado o no disponemos de él: Entre 601€ y 1.000€
- Si falseamos los resultados de dicha calificación: De 1.001€ a 6.000€
Conclusiones
Ahora que tenemos toda la información necesaria en nuestra mano, es esencial hacer buen uso de ella solicitando el certificado energético (si aún no lo tenemos) y elegir siempre a los mejores profesionales que realizan todos los trámites necesarios teniendo la seguridad de que se hace correctamente.